Soy una persona que se encariña con mucha facilidad pero que no se enamora con frecuencia, y no se pone en una relación seria seguido.
Tengo la capacidad de entrar en estado de enamoramiento con la persona con la que estoy saliendo en el momento, porque siento que todos tienen algo lindo y único, y todos merecen una oportunidad, entonces proyecto ese “cariño hacia el mundo” que tengo, con la persona “de turno”. Suena raro, pero soy consciente de que es así.
Al mismo tiempo, sufro de una especie de fobia a enamorarme de verdad, a estar de novia, a tener una relación seria involucrando muchos sentimientos. Por eso siempre prefiero estar sola a de novia, por eso cada vez que empiezo a sentir cosas reales por alguien me alejo, lo dejo, me pongo excusas, me siento ahogada… me miento.
Supongo que esto me sucede por el miedo a volver a salir lastimada que tengo.
Ahora bien, esta vez me está pasando algo diferente: no es solo ese “estado de enamoramiento” ( que SE que es temporal). Puedo percibir como voy sintiendo algo genuino y no provocado por mis ganas de hacer sentir bien al otro, sino algo que se genera en mi más allá de mi interés por el bienestar-felicidad de la otra persona. Lo que estoy empezando a sentir es algo que escapa de mis proyecciones y de mis fobias. Si bien por momentos puedo percibir como mis fobias acechan a salir a la superficie, lo que estoy sintiendo las deja atrás. Es algo más fuerte que yo, algo más allá.
Haciéndolo más básico:
-No hay lugar en mi cabeza para ninguna otra persona
-Soy feliz de ser su novia, y no me siento ahogada por mi fobia
-Tengo cara de estúpida, aun más que la que ya adquirí al nacer.
-Pienso en él y sonrío sin pensarlo, esté donde esté (al escribir esto me doy cuenta porque me miran raro en el bondi)
-Lo extraño
-Quiero que venga a vivir en mi armario
-Lo sigo extrañando
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